viernes, 17 de abril de 2009

lo que veo



veo archipielagos

domingo, 22 de febrero de 2009

Sentirse Querido


Quien no ha pensado alguna vez en su muerte?, ¿Quién no se ha imaginado a sus seres queridos llorando desesperados y eso le ha producido placer?, el placer que te da el sentirte querido en grado extremo, ver la magnitud que produce tu perdida en los demás.

¿Quién no se ha imaginado su entierro? La caja bajando poco a poco con cuerdas, como los funerales de las películas, con tu gente querida alrededor, mirando el vacío que se esta llenando con tu ataúd, con la misma progresión que se están vaciando sus almas y que les produce un dolor incurable, dolor que llena tus ansias de sentirte querido.

Yo si, muchas veces, incluso antes de saber que la muerte existía. Me acuerdo una vez, un domingo, que de pequeño me escondí debajo de la cama, esperaba inmóvil que mi madre me buscara y al no encontrarme, escuchar su chillido. Ese día estuve horas esperando, y nadie me echaba de menos, al final aburrido salí de allí decepcionado.

martes, 17 de febrero de 2009

el camino (IV)


Por fin he dejado atrás la carretera, ahora tengo que ir lo más rápido que pueda, después podré descansar escondido para que no me encuentren, mientras tanto voy a ir por el camino, que seguro que no hay nadie.

El camino me esta esperando, me guía, me esconde, el camino me protege, me impide salir de él, me encierra y me guarda, solo puedo seguir hacia delante, nunca encerrado fui tan libre, nunca el aire tan puro, nunca me peso tan poco las piernas, me encuentro bien en mi interior, escucho mis jadeos, en mi sueño, o no sueño, el bocadillo que encierra el exterior sigue vacío, nada me influye, tengo que buscar donde esconderme.

lunes, 9 de febrero de 2009

el cristo (III)


Ahí está la laguna, escondida, mansa, yo no sé como era capaz de meterme en esa agua tan sucia, llena de ranas y culebras, todavía me estremezco cuando recuerdo como esa bicha grande venía hacia mi contoneándose.

Me bañaba cuando iba a coger arcilla, para esculpirla y hacer caras sin nucas, solo frente, ojos, nariz, boca y barbilla, si era con barba, mejor, por eso, lo que mejor me salía eran los cristos, algunos incluso los termine por detrás.

Una vez terminado lo dejaba en la ventana para que se secara y allí se quedaba meses y meses, porque aunque ensuciaba el mármol, mi madre no se atrevía a tirarlo, ¡como iba a tirar la cabeza de un cristo!, ¡con sus espinas y todo!.

Menos mal que un día, como por arte de magia se caía, ya tenia la excusa perfecta para tirarlo.

domingo, 8 de febrero de 2009

Me mira.


Me mira, se supone que una foto es una cosa, que no mira, sin embargo me mira, y lo peor de todo le hago una foto a la foto y me sigue mirando, podría seguir así, hasta el infinito y siempre me miraría.
Siento sus ojos y me emociono, como cuando lo miro a él, y siento que él me atrapa, en algún sitio tiene que estar lo que el siente, no puede estar vacía esa mirada, estará en el papel, o en mi cabeza, no puede estar vacía esa mirada.

miedo (II)


Siempre me han dado miedo los cementerios, me acuerdo cuando desde la ventana de mi habitación se veía el cementerio, me imaginaba a los zombis subiendo por la calle como si fuera una manifestación, con sus harapos y su caminar lento, no se porque miraba por esa ventana, quizás era para asegurarme de que lo que yo pensaba era mentira. Menos mal que nos cambiamos de casa.

Ahora tengo que pasar por delante, ya me voy acercando, veo sus cipreses altos y la luna detrás, ya se que no pasa nada, pero el corazón se me acelera y parece que se me va a salir por la boca.

Empiezo a correr, no tengo que mirar, me lo repito continuamente y aún así, igual que no podía evitar mirar por la ventana, no puedo evitar mirar a la derecha, a la cancela, a ver si hay alguien agarrado a ella, a ver si entre todos la tiran abajo, menos mal que yo sigo corriendo con el corazón en la boca, ellos son lentos y es imposible que me cojan.

sábado, 7 de febrero de 2009

lo que veo





Hoy he visto cuatro cosas, soy libre y nada me altera, todo lo que veo alrededor me mira impasible.